Primer Año en Canadá

Hace un año pisé tierra canadiense, trayendo a cuestas sólo dos maletas, mi laptop, un montón de sueños y mucha pero mucha energía para comenzar una vida nueva.
Aunque ha sido apenas un año, siento que ha pasado mas tiempo, tal vez por todas las etapas vividas que siento que he estado aquí desde hace muchos años.

¿Qué me ha encantado de este primer año?

• La seguridad que se siente al caminar tranquila por las calles sin el temor que me van a asaltar.
• Lo tranquilo de la ciudad. Mis oídos, han aprendido a disfrutar del silencio de la ciudad, es muy rico poder dormir sin tener que oír una música a todo volumen, el tráfico, o cualquier escándalo que perturbe la tranquilidad. Adoro eso de Montreal.
• Vivir las cuatro estaciones. Me parece super chévere, ver como a lo largo del año todo va cambiando, eso hace que la vida aquí sea dinámica y nada aburrida.
• Los festivales, desfiles, eventos, etc. Esta ciudad no descansa durante todo el año, siempre hay algo que hacer. Como una vez lo escribí en un post, el que se fastidia es por que quiere, porque aquí actividades para todos los gustos.
• Las bibliotecas. Para mi contactar con la red de bibliotecas y la Gran Biblioteca es lo máximo. Me gusta leer y aprender, así que tener acceso a miles de libros es todo un placer para mi y lo mejor de todo es que es gratis!
• El sistema de transporte. Cuando vivia en Caracas no tenía carro porque el tráfico me estaba causando muchos stress, así que vivía cerca del trabajo y caminaba todos los días. Así que no me afectó el hecho de tener que usar el transporte público, me parece que funciona muy bien y se puede llegar a todas partes facilmente en metro o en autobus.
  
• Hablar en los tres idiomas. Aunque trabajo en una compañia francófona, utilizo el inglés y el español todos los dias. Antes de venirme, deseaba tener un trabajo donde pudiera utilizar los tres idiomas y afortunadamente lo conseguí.
  
• La calidad de los alimentos naturales. Aqui quien le guste comer sano se da banquete comprando en los mercados libres y en los supermercados. Los productos son frescos y de buena calidad. Claro, hay diferencia en los precios de algunos productos latinoamericanos.
• La calidad de vida. Aunque no gane una millonada, puedo pagar todos mis gastos y vivir bien.
• Mis nuevos amigos. Gracias a ellos he podido sobrellevar momentos en los que me creí perdida. Ahora, ellos pasan a ser mi nueva familia.
  

¿Qué no no me ha gustado?

• Mi primera experiencia con el sistema de salud, fue muy frustrante. Me hizo sentir sola y desamparada. Afortunadamente, mi hermana estaba aquí cuando me enfermé de los riñones y no me sentí tan sola. Sé de otras personas que han tenido experiencias muy buenas con el sistema de salud, en mi caso tal vez fue mala suerte.
• No tengo mas cosas de que quejarme de Canadá, a todo lo he buscado el lado positivo para no caer en el negativismo.
• El frío, no me ha molestado, sabía que vendría a un país con un invierno largo. Y como algunos inmigrantes han comentado, prefiero pasar frío que vivir en una ciudad insegura.

Mi Reflexión

Como lo he mencionado en otras oportunidades, inmigrar no es nada fácil y tampoco es para todo el mundo, este proceso requiere de determinación, constancia, apertura, humildad, ánimo, fortaleza y confianza. En mi proceso he pasado por momentos de incertidumbre, angustía, alegría, satisfacción, desesperanza, decepción, esperanza, ilusión, trabajo fuerte, recocijo, etc. ha sido como un carnaval de emociones y sensaciones. Ha sido un año cargado de mucho aprendizaje y lecciones de vida, ha sido como una metarmorfosis total y como todo proceso de transformación he retirado cosas que no usaba o no sirvían para reemplazarlas por otras nuevas y útiles. Sólo los que me conocen en persona han vivido conmigo toda esta gama de emociones.
Lo mejor que he hecho en mi vida, ha sido tomar la decisión de inmigrar porque esto es el mejor proceso de crecimiento personal que he tenido, aqui he puesto a prueba quien soy yo y que es lo que quiero en la vida. Sé que me quedan muchisimas más experiencias por vivir y estoy dispuesta a hacerle frente, así en un futuro lejano poder decir que he vivido.