Después de 9 meses

Al leer el título del post, lo más seguro que muchos piensen que dí a luz. No es así, lo que gesté durante 9 meses fue un sueño y al final las cosas se dieron como debían darse.

Desde que pisé suelo canadiense comencé a establecerme, seguí todo el procedimiento para integrarme a la sociedad quebeca. Así que hice mi francisación, curso de francés escrito, curso de búsqueda de trabajo, crear mi red de contactos, pasear, asistir a los eventos culturales, etc, etc, etc. Los que han seguido este blog, saben por lo que he pasado y como he asumido cada paso.
Es cierto que de lo que menos he escrito es sobre mi búsqueda de trabajo. No lo quise hacer porque es algo que no sé como describirlo. En mi caso, manejé muchas emociones, reflexioné mucho, me topé con gente que me criticó, me frustré, pero afortunadamente siempre conté con personas que me apoyaron y ánimaron a seguir adelante. Mis consejeros de empleo me decían que aguantara que todo era cuestión de tiempo. Mi búsqueda también coincidió con el verano, época floja para la buscar trabajo.
Sin embargo, con todos estos factores, tuve muchas entrevistas de todo tipo, en su mayoría me decía que a partir de Septiembre era que comenzaban los proyectos y que no me desanimara. Finalmente, llegó la portunidad que estaba búscando. El mes pasado comencé a trabajar en mi área y haciendo practicamente lo mismo que hacía en Venezuela, trabajo en una de las empresas donde soñaba trabajar. Se podran imaginar cómo me sentí después de haber pasado tres entrevista y que me llamen para decirme que comenzaba a trabajar al día siguiente. La emoción no la podía ocultar que lloré de la alegría. Quien me dió la noticia me felicitó por haber tenido muy buenas entrevistas y por haber asumido la actitud que asumí.
Mi primer día de trabajo era como ver un guión conocido, porque desde que estaba en Caracas al prepararme para ir a trabajar solía oir una emisora de Montreal por internet y me imagina haciendo lo mismo, pero en Montréal. Así que mientras me vestía lo recordé y se me erizó la piel, porque estaba oyendo la misma emisora, pero esta vez desde mi radio.
Al asignarme mi puesto de trabajo mi piel se volvió a erizar al ver el logotipo de la empresa en la pantalla y la tercera vez que me volví a erizar fue al ver mi dirección de correo electrónico, con mi nombre y el nombre de la empresa. Estaba viviendo la realización de mi sueño!
La gente es amable, comprensiva y chévere conmigo. Profesionalmente, me encanta el trabajo, es super-interesante, hay muchas cosas por aprender y por aportar.
Más a agradecida no puedo estar de estar donde estoy, todo el esfuerzo y preparación que hice desde Caracas hasta hoy, dió sus frutos.
Me sentía en deuda con la gente que sigue mi blog, porque no había compartido esta noticia con ellos, fueron muchas las cosas que me pasaron al mismo tiempo, entre ellas que me enfermé justo cuando comencé a trabajar, ahora estoy bien y los detalles los contaré en otro post. Por eso no había publicado la noticia antes. Por ahora, quiero que todos sepan que soñar no cuesta nada, lograr el sueño requiere de un esfuerzo... y es posible de alcanzar!